CARTA ABIERTA

Carta Abierta de las Madres del Garrahan a la CGT y la CTA
Buenos Aires, octubre de 2025
A la CGT y a la CTA:
Nosotras somos madres y familiares de pacientes del hospital Garrahan que nos autoconvocamos frente a las políticas de vaciamiento del hospital.
Nos dirigimos a ustedes desde el dolor más profundo, vemos cada día cómo la vida se nos escapa entre las manos.
Somos madres, padres y familias de hijos e hijas que atraviesan enfermedades graves, madres de niños con discapacidad, trabajadores y trabajadoras que ya no llegamos a fin de mes, hijos de jubilados que eligen entre comer o comprar los remedios, trabajadores que no tienen empleo, madres que hacen changas para alimentar a sus hijos, que viajan horas para llegar al hospital y madres de todo el país a quienes nos niegan la posibilidad de asistir al Garrahan porque bajaron programas desde el ministerio.
Detrás de cada trabajador y trabajadora hay una familia, hay hijos, hay madres que esperan.
Les enviamos esta carta a uds. porque hay hospitales, como el Garrahan, que hoy se están vaciando: faltan medicamentos oncológicos, faltan insumos, faltan profesionales. Se van médicos formados durante años porque el sueldo en la mayoría de los casos no llega a la canasta básica. Destruyéndose así equipos de trabajo indispensables para el funcionamiento del hospital.
Y mientras tanto, nuestros hijos se mueren. Hay niños que se están muriendo.
Nosotras no podemos esperar más.
Cada día que pasa es angustia, es impotencia, es desesperación antes estos hechos.
Por eso venimos a pedirles —no a rogarles, sino a exigirles desde nuestro derecho como pueblo— que estén del lado de la vida.
Que se levanten, que acompañen la lucha de las madres, de las familias, de los trabajadores a quienes ustedes representan, que apoyen la lucha en defensa de la universidad pública de donde salen nuestros grandes profesionales y defiendan a los más vulnerables: las personas con discapacidad y jubiladas.
Que convoquen YA al paro general, paro por la vida. Es hoy! Porque este silencio también mata y uds. están siendo cómplices de las políticas de crueldad.
Barrionuevo mismo ha reconocido que si los sindicatos se unieran en un paro nacional, las políticas de ajuste caerían.
Y si eso es así, ¿qué estamos esperando?
Porque esas políticas no solo destruyen el trabajo: están matando a nuestros hijos, jubilados, están matando la salud pública y educación pública, la libertad de expresión, están vendiendo nuestra soberanía, están matando la esperanza.
¿Qué esperan?
¿Cuál es el miedo?
¿A quién defienden si no es al pueblo?
Los trabajadores que ustedes representan también tienen hijos internados en el Garrahan, también tienen hijos discapacitados, también dependen de una salud pública que se está desmoronando.
En sus propias obras sociales hay pacientes que no consiguen turnos ni medicamentos.
Entonces, ¿qué más tiene que pasar?
No hay tiempo.
No hay excusas.
No hay neutralidad posible cuando hay vidas en juego.
Estas políticas de ajuste están destruyendo todo lo que costó décadas construir con la lucha de la que uds. mismos han sido parte: la salud pública, la educación, el trabajo, la dignidad.
Y frente a eso, ustedes —la CGT y la CTA— tienen el poder y la responsabilidad histórica de ponerse de pie junto al pueblo.
No estamos dispuestas a ver morir a nuestros hijos e hijas por la desidia, por la ambición y la corrupción de quienes nos gobiernan.
Nosotras, las madres del dolor, no pedimos privilegios.
Pedimos patria.
Patria es cuidar a los hijos, es defender la vida, es acompañar al que sufre.
Les pedimos que nos den la mano y no nos la suelten.
Les pedimos que estén del lado de la historia que salva, no del silencio que mata.
Porque ustedes también fueron paridos por una mujer.
Y porque hoy hay madres que lloran, día y noche, esperando que alguien escuche su grito.
Por nuestros hijos, por los de ustedes, por todos los hijos del pueblo: actúen.
Paren el país! Pero no dejen que nos sigan matando en silencio.
Con el corazón en la mano,
Las Madres y familiares del colectivo Soy Garraham , unidos en defensa de nuestro hospital.
