Argentina a punto de cometer el peor error de su historia: Abrir las «minas malditas»
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Por Horacio Muñoz de Toro
Sin ninguna duda, Argentina está siendo saqueada y disgregada, pero contrariamente a lo que nos han enseñado en nuestra historia contemporánea, abundante en batallas liberadoras y en una larga lista de mártires que dieron la vida por defender la soberanía integral de tierras y pueblos, hoy estamos ante una política entreguista, con puertos fuera de los controles estatales, ajenos a las cuantificaciones de lo que entra y sale por la llamada hidrovía, que para quienes defendemos lo nuestro seguirá siendo el Río Paraná.
Un virreinato declarado y ejercitado sin impunidad, que responde a EE.UU., al Sionismo y al Capital Financiero Internacional, es tan evidente lo que decimos, que sale publicado en declaraciones -una suerte de blanqueo- de sumisión y entrega evidenciado por los viajes de la ex Jefa del Comando Sur de EE.UU., Laura Richardson (1), con su mirada puesta en el Litio, en la Patagonia, en el cese de negocios con China y la imposición de políticas inherentes a EE.UU. y no a nuestra Patria.
Era necesario aclarar esto a los lectores, para desembocar en lo que plantea el artículo referido al uranio, tan necesario para el imperio generador de guerras, que tanto el presidente Milei (2), como Ignacio Torres, Gobernador de Chubut (3), se ven obligados a transgredir leyes, consensos y conciencia, por el apuro de cumplir con quienes persiguen fines oscuros para con ese uranio que es la industria de la muerte, de las guerras y de la futura autoextinción humana.
En ese devenir de cosas, la provincia de Chubut carece de estado de derecho persiguiendo y criminalizando a las personas que defienden el medio ambiente y luchan contra este tipo de eventos, cuestiones que en Alternativa hemos publicado en dos entrevistas. (4) (5)
Por todo lo expuesto, y en estos días, en donde se ha hablado de lo que fue la Revolución de Mayo, creemos que hoy más que nunca debemos reconstruirla para tratar de ejercer nuestra independencia -que sigue siendo virtual- y quebrar con estas políticas que solo nos llevan al vaciamiento, la pobreza y la contaminación de los biosistemas regionales, y que son fragmentados por estos traidores a la Patria que deberán ser ajusticiados algún día. Esperamos que ese día no sea lejano.
Depende solo de nosotros mismos.
