UN LIBRO, SUS OMISIONES Y LAS LIMITACIONES DE UNA INVESTIGACIÓN

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Julián Zicari es un reconocido autor argentino, especializado en historia económica, con una sólida formación académica que incluye tres licenciaturas y un doctorado. Además, es investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).
Por Alejandro Olmos Gaona
Su trayectoria incluye la publicación de
varios libros, algunos de los cuales destacan por sus valiosos aportes al
análisis económico e histórico. Entre ellos, su más reciente obra, un extenso
libro de 526 páginas sobre el exministro de Economía José Alfredo Martínez de
Hoz, ha alcanzado gran notoriedad, con tres ediciones publicadas y una
recomendación pública de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El libro se presenta como un estudio exhaustivo sobre las políticas económicas implementadas durante la gestión de Martínez de Hoz bajo la dictadura militar (1976-1981), respaldado por una abundante bibliografía que incluye diarios, revistas, folletos, comentarios de economistas, entrevistas con funcionarios y diversas referencias que contextualizan la figura del exministro y su impacto en la historia económica argentina.
Sin embargo, un aspecto sorprendente y cuestionable de esta obra es la completa omisión de las investigaciones y aportes realizados por mi padre, un periodista e investigador que jugó un rol fundamental en la denuncia de las irregularidades financieras durante la dictadura, particularmente en relación con el endeudamiento externo. Mi padre en 1982, inició una causa judicial emblemática contra Martínez de Hoz, en la que se investigaron las maniobras fraudulentas que caracterizaron la política de endeudamiento durante el régimen militar. Esta causa, conocida como la "causa de la deuda", derivó en el procesamiento del exministro y aportó pruebas contundentes sobre la violación de la legislación vigente, incluyendo la Carta Orgánica del Banco Central.
Mi padre también publicó un libro que documenta minuciosamente este proceso, recopilando pruebas y antecedentes judiciales que demostraron cómo se articularon mecanismos legales para perpetrar un fraude financiero de gran magnitud.
Es notable que, a pesar de la relevancia de estas investigaciones, el libro de Zicari no haga ninguna mención a Olmos, ni a la causa judicial, ni al libro que este escribió. Esta omisión resulta particularmente llamativa dado que Zicari incluye en su obra abundantes referencias sobre el endeudamiento de la dictadura, lo que muestra la abundancia de fuentes consultadas.
La ausencia de cualquier referencia a mi padre no solo representa una laguna significativa en el análisis, sino que también plantea interrogantes sobre la profundidad de la investigación realizada por Zicari. A ello debo sumar que la Sicaria editorial que publicó el libro de Zicari es la misma que editó el libro de mi padre, además de otros libros míos sobre la deuda, lo que hace aún más inexplicable esta omisión.
La falta de reconocimiento a Olmos no es un caso aislado. A excepción de la economista Noemí Brenta, quien ha citado reiteradamente las investigaciones de mi padre en sus trabajos sobre la economía de la dictadura, la mayoría de los estudios académicos sobre este período tienden a ignorar su contribución. Esto es particularmente injusto si se considera que mi él llevó adelante sus investigaciones en un contexto de enorme riesgo personal, durante la dictadura militar, y logró aportar pruebas que fueron fundamentales para demostrar las irregularidades del proceso de endeudamiento. Su trabajo no solo tuvo un impacto en el ámbito judicial, sino que también contribuyó al debate público sobre la responsabilidad de los actores económicos y políticos de la época.
Un análisis más riguroso por parte de Zicari habría implicado consultar la causa original de la deuda, así como las causas acumuladas que surgieron posteriormente. Estos documentos contienen testimonios, pruebas y sentencias judiciales, como la dictada por el juez Jorge Ballestero en el año 2000, que ofrecen una perspectiva mucho más completa y fundamentada sobre las acciones de Martínez de Hoz y sus colaboradores. En lugar de basarse únicamente en bibliografía secundaria, entrevistas personales y comentarios de economistas, Zicari podría haber enriquecido su análisis con fuentes primarias de carácter judicial, que tienen un valor probatorio superior debido a su naturaleza oficial y su contexto legal.
La omisión de Olmos también puede interpretarse como un reflejo de una tendencia más amplia en la historiografía y los estudios económicos sobre la dictadura. A pesar de su relevancia, mi padre ha sido sistemáticamente ignorado en la mayoría de los trabajos académicos sobre el período. Esto incluye no solo su labor en la causa de la deuda, sino también su rol como editor del periódico "Palabra Argentina", considerado el medio más importante de la resistencia peronista durante los años 50, con una circulación que, según una carta de John William Cooke a Juan Domingo Perón, alcanzaba más de un millón de lectores. A pesar de su encarcelamiento bajo el gobierno de Pedro Eugenio Aramburu y su activa participación en la lucha política, mi padre se encuentra ausente en la mayoría de los relatos históricos sobre la resistencia peronista y la economía de la dictadura.
La crítica al trabajo de Zicari no busca desmerecer su esfuerzo ni la calidad de su investigación en otros aspectos, pero sí destacar una limitación significativa en su enfoque. Al centrarse exclusivamente en un análisis económico, Zicari parece haber descuidado fuentes judiciales y testimonios que podrían haber proporcionado una visión más integral del accionar de Martínez de Hoz. Además, su tendencia a citarse a sí mismo en la bibliografía, podría interpretarse como una muestra de vanidad intelectual que resta objetividad a su trabajo.
En conclusión, el libro de Zicari representa
un aporte valioso al estudio de las políticas económicas de la dictadura, pero
su omisión de las investigaciones de Alejandro Olmos constituye una falla
importante. Reconocer el trabajo de mi padre no solo sería un acto de justicia
histórica, sino también una contribución a un análisis más completo y riguroso
de uno de los períodos más oscuros de la historia argentina. La consulta de
fuentes judiciales y el reconocimiento de los esfuerzos de investigadores como
Olmos le habrían permitido a Zicari ofrecer una obra más sólida y
representativa de la complejidad del proceso de endeudamiento durante la
dictadura militar.