Chile vuelve a exigir barbijos en centros de salud por temporada de enfermedades respiratorias

Ante el aumento estacional de enfermedades respiratorias, el gobierno chileno determinó el uso obligatorio de mascarillas en todos los servicios de urgencia del país desde el 15 de abril. La medida, que se extenderá hasta el 31 de agosto.
El gobierno chileno decidió restablecer el uso obligatorio de en todos los servicios de urgencia del país, tanto públicos como privados, a partir del 15 de abril. Esta disposición, que se extenderá hasta el 31 de agosto, forma parte de las acciones preventivas ante el aumento estacional de enfermedades respiratorias típicas del invierno austral. La medida aplica para todo personal médico, pacientes y acompañantes que ingresen a estos recintos de salud.
Las autoridades sanitarias especificaron que solo serán válidas los barbijos quirúrgicas de tres pliegues, así como los modelos N95 y KN95, todos ellos con certificación de eficacia comprobada. El uso correcto de estos implementos, cubriendo completamente nariz y boca, será fiscalizado en los centros de atención de urgencias. Cabe destacar que esta obligatoriedad no se extiende al transporte público ni a otros espacios cerrados, aunque se mantiene la recomendación de uso voluntario para personas con síntomas respiratorios o pertenecientes a grupos de riesgo.
Esta medida se enmarca dentro de un conjunto de acciones preventivas que incluyen la campaña de vacunación gratuita contra la influenza y el Covid-19, dirigida especialmente a adultos mayores, mujeres embarazadas, enfermos crónicos y personal de salud. El Ministerio de Salud enfatizó la importancia de la inoculación para reducir los casos graves que requieran hospitalización, considerando la circulación simultánea de diversos virus respiratorios como el sincicial, adenovirus, parainfluenza y rinovirus, además de los ya mencionados.
El contexto epidemiológico actual muestra una situación controlada respecto a años anteriores, particularmente en lo que respecta al virus sincicial, que en 2023 causó la muerte de cuatro lactantes. La incorporación del Nirsevimab, un anticuerpo monoclonal distribuido por el sistema público de salud, ha permitido reducir a cero las muertes infantiles por esta causa durante el presente año. Sin embargo, las autoridades mantienen un monitoreo constante de la situación, dejando abierta la posibilidad de extender la medida más allá del 31 de agosto si las condiciones sanitarias lo requieren.
Como complemento a estas disposiciones, el Ministerio de Salud continúa promoviendo las medidas básicas de prevención: lavado frecuente de manos, uso de pañuelos desechables y cubrir boca y nariz al estornudar. Si bien por ahora no se contempla extender la obligatoriedad del uso de mascarillas a otros espacios, las autoridades no descartan esta posibilidad ante eventuales brotes localizados o un aumento significativo de casos.
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