Los hondureños eligieron presidente entre la amenaza de Trump y denuncias de fraude

01.12.2025
Más de seis millones de hondureños eligieron presidente, alcaldes, diputados y representantes al Parlamento Centroamericano (AFP/AFP)
Más de seis millones de hondureños eligieron presidente, alcaldes, diputados y representantes al Parlamento Centroamericano (AFP/AFP)

Nasry Asfura llegó a esta elección en empate técnico con la izquierdista Rixi Moncada y el presentador de televisión Salvador Nasralla. Se esperaban resultados oficiales pasada la madrugada.

Los hondureños votaron este domingo para elegir a su nuevo presidente bajo la amenaza del mandatario estadounidense, Donald Trump, de recortar la ayuda al país si no ganaba el derechista Nasry Asfura. Asfura, del Partido Nacional (PN), figuró en las encuestas en empate técnico con la abogada izquierdista de 60 años Rixi Moncada, del gobernante partido Libre, y con el presentador de televisión de 72 años, Salvador Nasralla, del derechista Partido Liberal (PL). Al cierre de esta edición no existían resultados oficiales y el Consejo Nacional Electoral (CNE) pidió respetar la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), a realizarse a partir de las 21 horas (las 12 de la madrugada de Argentina).

Los más de seis millones de hondureños eligieron a la persona que reemplazará a Xiomara Castro el 27 de enero de 2026, junto con 298 alcaldías, 128 diputados al Parlamento nacional y 20 representantes al Parlamento Centroamericano. Honduras no tiene segunda vuelta: gana quien obtenga más votos. Desde temprano se registraron largas filas en centros de votación de Tegucigalpa y otras ciudades del interior, con presencia de simpatizantes partidarios que entonaban cánticos y desplegaban propaganda en las inmediaciones de las escuelas en una jornada que debió ser prorrogada por una hora, extendiendo el cierre de la votación de las 17 horas hasta las 18 horas locales.

Los principales desafíos

Más allá de la contienda partidaria, los votantes acudieron a las urnas atravesados por problemáticas estructurales aún sin solución: pobreza persistente que afecta al 60 por ciento de la población; violencia urbana entre las más altas de la región pese a la reducción registrada bajo el estado de excepción; migración masiva; y la persistencia del narcotráfico y la corrupción, que afectan a todas las fuerzas políticas. El recuerdo del golpe de estado contra Zelaya en 2009 continúa definiendo alianzas, desconfianzas y discursos.

En paralelo a la contienda, organizaciones feministas señalaron que la posible elección de Moncada convertiría a Honduras en uno de los pocos países con dos mujeres consecutivas en la presidencia, pero recordaron que la violencia machista permanece en niveles críticos. En 2024 el país registró la tasa de feminicidios más alta de América latina y el Caribe (4,3 por cada 100 mil mujeres, según la Cepal) y acumula 7.746 muertes violentas de mujeres desde 2005.

La activista Jessica Sánchez señaló que los avances del gobierno de Xiomara Castro han sido "puntuales", como la Ley Casa Refugio, pero recordó que la representación femenina sigue siendo baja: 6 por ciento en alcaldías y 27 por ciento en el Parlamento. La actual presidenta votó en Catacamas, en la provincia de Olancho, acompañada por el expresidente Manuel Zelaya. Castro afirmó que el sufragio es un acto de "soberanía" y que la jornada ocurrió en un momento "crucial" para la democracia.

Bajo el fantasma del fraude

El proceso electoral llegó debilitado en medio de una serie de denuncias cruzadas por fraude. En semanas previas la Fiscalía y las Fuerzas Armadas habían sido señaladas por posibles interferencias, tras amenazas de detenciones a funcionarios electorales y cuestionamientos al manejo del material. La Fiscalía abrió investigaciones contra autoridades electorales, basadas en audios cuestionados por su posible manipulación.

Las Fuerzas Armadas pidieron acceso a las actas, lo cual está prohibido por ley, alimentando temores de intromisión militar. La ONU, la OEA y Human Rights Watch también advirtieron sobre el riesgo que representan las tensiones entre la Fiscalía, los militares y las autoridades electorales para la credibilidad del proceso.

La Misión de Observación Electoral de la Unión Europea desplegó más de 100 observadores. Su jefa adjunta, Tania Marques, alertó sobre retrasos y paralizaciones previas en el CNE y expresó preocupación por la capacidad del TJE para resolver impugnaciones. Marques recordó que el sistema de transmisión preliminar (TREP) no reemplaza la validez legal de las actas físicas.

Tres caminos muy dispares

Rixi Moncada, exministra y figura cercana al expresidente Manuel Zelaya, buscaba retener el gobierno para Libre tras el mandato de Castro. Su campaña estuvo marcada por denuncias de intentos de fraude y cuestionamientos a sus rivales, a los que señaló como expresiones de la "oligarquía" golpista. Prometió profundizar el proyecto político de Castro, con énfasis en la justicia social, mayor tributación a las élites y continuidad de la política exterior actual.

Salvador Nasralla, presentador de televisión y figura consolidada de la derecha, intentó capitalizar el voto de desgaste contra Libre y contra el Partido Nacional. Sostuvo un discurso anticorrupción y propuso reformas institucionales de alcance amplio. En política exterior se mostró partidario de acercarse a Estados Unidos y restablecer relaciones con Taiwán, tras la ruptura de sus lazos diplomáticos en 2023. Sus reiteradas denuncias de manipulación electoral volvieron a marcar la campaña.

Nasry Asfura, exalcalde de Tegucigalpa y referente del derechista Partido Nacional, llegó fortalecido por el respaldo explícito de Trump, quien advirtió que cortaría la ayuda a Honduras si él no gana. Asfura agitó la campaña al prometer indultar al expresidente Juan Orlando Hernández, condenado por narcotráfico en Estados Unidos, y basó su propuesta en "orden, inversión y empleo". En política exterior, también planteó un giro hacia mayor cercanía con Washington y un eventual retorno a Taiwán.

El factor Trump

Las intervenciones de Trump terminaron de encender la recta final. Además de respaldar a Asfura, advirtió que si gana la izquierda Honduras quedaría "bajo control de Maduro y sus narcoterroristas", llamó "comunista" a Moncada y calificó a Nasralla de "casi comunista". El presidente estadounidense dijo este domingo que tras una evaluación encontró que el gobierno del expresidente Joe Biden "le tendió una trampa" al exmandatario hondureño Juan Orlando Hernández (2014-2022), condenado en 2024 en Estados Unidos por tres cargos de narcotráfico, por lo que decidió concederle un indulto.

"La gente de Honduras realmente pensó que le habían tendido una trampa, una trampa de la administración Biden, y analicé los hechos y estuve de acuerdo con ellos", explicó el mandatario a la prensa a bordo del Air Force One de regreso a la capital estadounidense. Trump no citó evidencias sobre la supuesta trampa tendida al exmandatario hondureño. Eso sí, el presidente no culpó directamente a Biden sino a los asesores que tenía el demócrata en su periodo presidencial (2021-2025).

"Si alguien vende drogas (en un país), eso no significa que se deba arrestar al presidente y meterlo en la cárcel de por vida", valoró Trump sobre el caso de Hernández. De acuerdo a la Fiscalía estadounidense, Hernández formó parte de un grupo de personas investigadas por la Agencia Antidrogas (DEA) desde el año 2013, en el que fue electo, por actividades "relacionadas con la importación de cocaína a Estados Unidos".

Fuente:

https://www.pagina12.com.ar/2025/12/01/los-hondurenos-eligieron-presidente-entre-la-amenaza-de-trump-y-denuncias-de-fraude/