Las vaquitas son ajenas: supermercados argentinos importarán asado de Brasil, ante los altos precios locales

04.04.2025

En principio, serán solo las grandes cadenas de supermercados de la Patagonia, donde el kilo de asado argentino ronda los $20.000, las que podrán comprar carne al vecino país y bajar los precios de góndola a la mitad.

Argentina, un país reconocido mundialmente por su producción ganadera y la calidad de su carne, comenzará a importar asado desde Brasil ante los elevados precios que este alimento -emblemático en la gastronomía local- tiene en el mercado interno. En principio, la medida sólo regirá para las grandes cadenas de supermercados ubicadas en la Patagonia.

Se prevé que la iniciativa comience a aplicarse en los próximos días con foco en las provincias del sur del país. En este marco, distintas cadenas de supermercados, como La Anónima, podrán ofrecer este corte a un costo significativamente menor que las carnicerías, almacenes y comercios de cercanía.

En la Patagonia, por ejemplo, el asado brasileño se venderá a aproximadamente $9.000 por kilo, frente a los $22.000 que cuesta el producto argentino en esa región. Según los productores locales, los precios se encarecieron ante el atraso cambiario que sufre la economía, que hizo que el novillo nacional sea el más caro del Mercosur, mientras que el asado del vecino país se posiciona como el más económico de la región.

La importación de asado desde Brasil también está facilitada por un cambio sanitario relevante: el 1 de abril, el vecino país fue declarado libre de aftosa -una enfermedad viral que produce lesiones en la boca y patas de los animales- sin vacunación, lo que mejora su estatus y le permite competir en mercados como el argentino.

Un "despropósito"

El consultor en agronegocios, Carlos Kohn, dijo que esta medida es un "despropósito" para un país con una fuerte identidad ganadera, y advirtió sobre los riesgos sanitarios que podría tener importar carne con hueso, como el asado, que podría introducir virus como el de la aftosa.

Kohn, además, explicó que hay una diferencia entre la hacienda criada en ambos países: "En Brasil, gran parte de la carne proviene de rodeos engordados en corrales con subproductos industriales, lo que le da un sabor más dulce y mayor engrasamiento. En Argentina, el 80% de la vida del animal es a pasto, con una producción natural que no usa aditivos».

Y añadió: "En dos o tres meses, entre junio y diciembre, habrá abundante oferta de carne tras la recuperación post-sequía. Es una cuestión circunstancial".

Otros referentes del sector, en cambio, ven en esta estrategia una solución temporal para aliviar la presión sobre los consumidores, especialmente en regiones donde el precio de la carne se ha disparado.

Expertos como Andrés Costamagna, de la Sociedad Rural, explicaron que la carne actúa como un "producto gancho" para atraer clientes y ventas, y la competitividad del precio brasileño es innegable en un momento en que Argentina "quedó cara en dólares".

"Hoy como Argentina quedó cara en dólares, el brasileño puede liquidar el asado y competir con nosotros; lo puede hacer también con cerdo, leche, pollo, con casi todo. En carne vacuna, sólo nos manda el asado porque el resto de los cortes los vende mejor, a precios más elevados, a otros destinos", cerró Costamagna

De momento, sólo las cadenas de supermercados de la Patagonia podrán importar carne desde Brasil, dado que allí el kilo de asado cuesta casi el doble que en la región central. No obstante, algunas empresas de Capital Federal comenzaron a averiguar si, con el correr de las semanas, podrán sumarse a la medida.

¿Qué pasa con los precios internos?

El valor de la carne vacuna se disparó en los primeros días de febrero y, si bien en marzo mostró cierta estabilidad, no dio señales de retroceso. Después de un marzo que dejó importantes aumentos en las góndolas de alimentos y bebidas, las consultoras privadas esperan que la inflación siga en ascenso, alejándose del objetivo del gobierno de Javier Milei que era perforar el piso del 2% en abril.

La consultora de Orlando Ferreres estimó que la inflación de marzo oscilaría entre el 2,8% y 2,9%, contra el 2,4% informado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en febrero y el 2,2% de enero.

En la misma sintonía, la consultora Eco Go previó un alza de precios del 2,6%; mientras que LCG alertó que la inflación se aceleró a partir de la segunda semana de marzo.

Fuente:

https://www.conclusion.com.ar/politica/economia/las-vaquitas-son-ajenas-supermercados-argentinos-importaran-asado-de-brasil-ante-los-altos-precios-locales/04/2025/