Lemoine y Milman presentan un proyecto contra la Ley de Identidad de Género

Este ataque no ocurre en el vacío. El gobierno de Milei atraviesa una profunda crisis política. A los escándalos de corrupción como el del hallazgo de valijas con dinero no declarado relacionado a altos funcionarios, se le suman derrotas importantes en el Senado, como el avance de la ley de emergencia en discapacidad o el rechazo al ajuste jubilatorio que proponía el oficialismo. Ahora amenaza con vetos, pero se pudo ver que el plan de ajuste y ataques antiderechos solo se sostiene gracias la complicidad de las centrales sindicales y distintos sectores en el Congreso.
En este contexto, dos diputados de La Libertad Avanza, Lilia Lemoine y Carlos Zapata, y uno del PRO, el bullrichista Gerardo Milman, presentaron un proyecto que busca modificar la ley de identidad de género y prohibir la educación sexual desde el Estado. Un ataque que busca desviar una agenda crítica para Milei, que tal como hacen los sindicatos con las luchas en curso, pretende incentivar divisiones entre la gran mayoría que sufren despidos, recortes y cada medida reaccionaria por el miedo a que surja una fuerza social unida en las calles que derrote su plan.
El proyecto: un ataque antiderechos
Entre sus puntos más reaccionarios, el proyecto:
En la práctica, esto implicaría un retroceso en derechos conquistados con lucha, un intento de reinstaurar una mirada patologizante, biologicista y represiva sobre las identidades de género.
Hace tan solo medio año Milei equiparaba la homosexualidad con pedofilia en el Foro de Davos, lo que mostró la enorme capacidad de responder en la calle que dio el colectivo LGBTIQ+ junto a otros sectores reclamando. La respuesta masiva en las calles fue clave en la disputa contra los discursos de odio que difunde Milei desde el Estado, ese es el camino. Recientemente volvieron a insistir arremetiendo contra el diputado Esteban Paulón, activista por los derechos del colectivo LGBT+, quien fue acusado de "pedófilo" y recibió agresiones en un programa de streaming vinculado al oficialismo.
La salud como un negocio: el verdadero plan
Este ataque se enmarca en una política más amplia de vaciamiento de la salud pública. Mientras se recortan partidas esenciales, el gobierno piensa destinar solo en este año 18 veces el presupuesto del Garrahan tan solo al pago de la deuda con el FMI. Para Milei, todo es mercancía: la salud, la educación, la identidad.
Desde enero empezaron a llegar mails desde las dependencias de salud como el Durand y Fernandez suspendiendo cirugías y avisando faltantes de hormonas y turnos de tratamiento, un ajuste que ya está sucediendo en los hechos y que también llegó a provincia el "alerta" de estos posibles faltantes.
Quieren que con nuestros sueldos que no nos permiten llegar al 10 de cada mes garanticemos el acceso a derechos transformando la salud en un negocio como los del Ministro de Salud, Mario Lugones, es el hilo rojo que une los despidos, el vaciamiento de hospitales y ahora este proyecto antiderechos.
El proyecto también apunta contra la Educación Sexual Integral (ESI), aunque no la menciona directamente. Al prohibir que el Estado promueva contenidos sobre género y sexualidad, busca silenciar a las escuelas, impedir debates y bloquear herramientas fundamentales para la niñez y la adolescencia. La ESI no solo enseña sobre derechos, identidades y autocuidado. No solo quieren dejar al 60% de las infancias que está bajo la línea de pobreza sin hospitales como el Garrahan, que permiten dar respuesta a las enfermedades más graves, también quieren borrar del mapa herramientas con las que que permiten que reconozcan y denuncien situaciones de abuso. Pero los ataques ya no pasan sin respuesta, por eso les trabajadores del Garrahan convocaron a una movilización donde ya se sumaron decenas y decenas de sectores que quieren defender la salud pública.
Hay fuerza para enfrentarlos
Tenemos la fuerza, lo vimos en: la marcha multitudinaria el 1F contra las políticas de odio, en les trabajadores del Garrahan que resisten el vaciamiento volviéndose un símbolo de lucha, en las huelgas de estatales y docentes en varias provincias, en las tomas y movilizaciones estudiantiles en universidades y secundarios. También la vemos en las luchas obreras emblemáticas que vienen dando los trabajadores de SECCO, Georgalos y Shell, que resisten los despidos y ajustes patronales con acciones como cortes en la Panamericana enfrentando la represión.
Las infancias no pueden esperar y ver como cierran hospitales en nuestras caras o como atacan derechos conquistados, no podemos esperar al 2027 como nos proponen desde los sindicatos encabezados por el peronismo que están más preocupados en pronunciarse por la candidatura de Axel Kicillof, que está dejando pasar los despidos en la provincia muy alejado de los reclamos de la calle. Las burocracias nos quieren a todes peleando por nuestra cuenta, algunas directamente siendo cómplices del ajuste, otras limitándose a denunciar ataques del gobierno sin convocar a ni una asamblea.
Por eso hay que golpear con un solo puño en la marcha del 17 convocada por el Garrahan, y que sea el inicio de un plan de lucha coordinando toda esa fuerza social que vemos en cada reclamo desde abajo para derrotar el plan de ajuste y las políticas anti derechos del gobierno.