LOS CIEN CAÑOS, ENEMIGOS OCULTOS DEL PARANÁ

03.11.2025

Un documento realizado por el INSTITUTO DE PENSAMIENTO POPULAR SOBERANÍA, muestra el descontrol y contaminación a nuestro río Paraná avalado por un Estado ausente y cómplice, que atenta sobre la vida no solo del río y su biosistema, sino, sobre quienes bebemos el agua.












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Por Horacio Muñoz de Toro

Debemos cambiar nuestras actitudes frente a lo que atenta contra la vida, porque cada día,  vivimos aferrados a solucionar los problemas inmediatos que cada uno conlleva y en ese trajín, como dice el refrán, nuestro árbol no nos permite ver el bosque. Por eso reivindicamos el trabajo que viene realizando Luciano Orellano, Carlos del Frade, Germán Mangione, y mucha gente que busca instalar un estado de conciencia superador en defensa de nuestro Paraná, de nuestra soberanía, de poner fin a los saqueos frente a un Estado cómplice que nunca ha tenido en cuenta el concepto de lo que significa una vida sustentable.

Sugerimos a los lectores y a quienes vean el video al final de esta nota, a leer también, la documentación volcada en los libros, -que no son best seller-  que llevan en su interior años de investigaciones documentadas y que deberían revivir un sentimiento patrio que nos relata la historia de tantos mártires que dieron su vida luchando contra el saqueo, corriendo a los enemigos, y que hoy se reduce a un latrocinio consensuado por las estructuras de poder de la Argentina y que si no actuamos, estaremos avalando la entrega e ignorando el sacrificio de tantos compatriotas que además de beber venenos en el agua diaria, se ven sumidos en la pobreza por una política virreinal de entrega.

El día 3 de noviembre de este año, se realiza una audiencia para promover el calado a 40 o 44 pies del Paraná, un verdadero ecocidio que va a afectar no solo a la vida del río, sino, a muchas poblaciones que van a quedar complicadas para la captación del agua, como es el caso de Victoria, Entre Ríos. 

Debemos despertar antes que sea tarde, el agua es un tema de todos, la vida también, pero fundamentalmente, debemos defender nuestra Patria y nuestra soberanía.