MALVINAS -LA PERDIDA PERLA AUSTRAL- RECONOCIDA Y JAMAS OLVIDADA POR EL PUEBLO ARGENTINO PERO DESPRECIADA POR SU ACTUAL PRESIDENTE.

08.04.2025




                                                                                                                .

Por Mirtha Susana Rodriguez

La nota se refiere a la extracción de petróleo por empresas israelíes y británicas, en mi opinión "saqueo", pero no voy a referirme a eso que ya fue decidido en el año 2024 POR LOS USURPADORES, sino más bien a la desidia sobre el tema que ostenta Javier Milei. El pasado 2 de abril la mayoría de los argentinos soportamos con mucha vergüenza no exenta de bronca en la misma proporción, el discurso pronunciado por el primer mandatario, esta retórica la viene sosteniendo desde que asumió la presidencia manifestando desgano y poco interés para la causa que defiende la soberanía argentina sobre las islas.

Eso fue observado y aprovechado por el gobierno británico, al cual jamás le faltaron motivos para demostrar su piratería y ansias de recursos. Lo cierto es que, en casi siete meses de iniciado el gobierno libertario, sucedieron tres situaciones rotundas que no obtuvieron una manifestación profunda de rechazo por parte del presidente.

La primera fue la visita a territorio isleño por parte del ministro de Relaciones Exteriores, David Cameron, quien en clara provocación declaró que espera que los habitantes sigan bajo jurisdicción británica "para siempre". Mostrando total apatía, Milei no manifestó su opinión sobre la situación, mientras que el gobernador Gustavo Melella lo declaró "Persona Non Grata" en la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.

Días después de esa visita, Inglaterra amplió unilateralmente y sin consultar su control sobre una superficie sobre el Mar Argentino por un total de casi 170.000km2. Con estas medidas, Gran Bretaña se aseguró el uso de un área para actividades prospectivas, la pesca, o de exploración petrolera. En ese momento tampoco Milei expresó su repudio a la situación.

Frente a esta pasividad, los británicos decidieron realizar el 24 de junio del 2024 una consulta popular en Malvinas en busca de lograr el apoyo para explotar petróleo en la zona de las Islas. Lo curioso es que la empresa que presentó el proyecto es de origen israelí, -Navitas Petroleum-país con el que Milei se muestra aliado ferviente desde que asumió, y al que defiende en su disputa con el pueblo palestino.

En esta ocasión tampoco se manifestó y mucho menos se preocupó por averiguar sobre el impacto ambiental que dicha exploración puede tener sobre los recursos naturales argentinos.

Obviamente La estrategia británica consiste en hablar de autodeterminación de los pobladores, teoría casi brindada en bandeja por Milei en su reciente discurso. Pero es un cuento para giles. No se trata de una población colonizada sino de un territorio colonizado. No son un pueblo preexistente invadido, son ingleses y escoceses traídos a suelo argentino. Preguntarle a los kelpers por su situación es casi tan irrisorio como consultarle a los colonos israelíes que viven en Cisjordania a qué estado quieren pertenecer. Y eso lo dice la Resolución 2065 de las Naciones Unidas.

La etapa inicial de la explotación hidrocarburífera, prevista para el año en curso, contempla la perforación de 23 pozos. Además de tratarse de un saqueo multimillonario, la explotación también pone en riesgo la biodiversidad de la región. De concretarse, sería la primera perforación en la historia del archipiélago argentino.

Gran Bretaña ocupa el 25% de nuestro territorio. El caso más conocido es el de las Islas Malvinas pero en Georgia -llamada originalmente San Pedro- vive una dotación permanente de 25 personas, en su mayoría científicos apadrinados por el ejército británico. Es otro punto geoestratégico fundamental, sobre todo en la disputa por la Antártida: la reclamación argentina y la británica coinciden idénticamente y en 2048 se rediscutirá el tratado que establece soberanía sobre el territorio. En el museo inglés de las Islas, los colonizadores definen a las Malvinas como su «puerta a la Antártida».

Antes de la guerra, operaban YPF y Gas del Estado. Perón había avanzado en pisos de diálogo con la realeza británica y se llegó a discutir un condominio y la administración conjunta de las Islas. Galtieri y compañía tiraron por la borda años de trabajo diplomático sostenido. La colonización de Malvinas tiene 200 años, decenas de resoluciones favorables a la Argentina en la ONU y un aplastante reconocimiento internacional de su condición de colonia. Flaco favor le hicieron al país los milicos del proceso que tanto hablaban de patria.

De la misma manera que lo hace la gestión actual, tenemos un presidente ocupado en sostener a su ministro de Economía Luis Caputo, o en organizar algún viaje al exterior para ir con su hermana en busca de la foto con su homónimo Donald Trump, recibir premios truchos y por supuesto pedirle divisas al Fondo Monetario para seguir hipotecando nuestra soberanía.