PATAGONIA: DE REBELDE A REPARTIDA

LA PATAGONIA ARGENTINA HA SIDO HISTÓRICAMENTE UN TERRITORIO DE DISPUTA, NO SOLO POR SU RIQUEZA NATURAL, SINO TAMBIÉN POR SU POSICIÓN ESTRATÉGICA.

Por: Juan A Frey

En las últimas décadas, la creciente presencia de intereses extranjeros en la región ha generado preocupación sobre una posible pérdida de soberanía y hasta especulaciones sobre una eventual secesión.

La Patagonia es una de las regiones más ricas en recursos naturales del país. Posee vastas reservas de petróleo, gas, litio y agua dulce, además de una biodiversidad única. Esta riqueza ha atraído inversiones extranjeras, muchas de ellas con objetivos extractivistas. Empresas multinacionales han adquirido grandes extensiones de tierra, lo que ha generado un debate sobre el impacto de estas adquisiciones en la soberanía nacional.

El avance de capitales foráneos no es un fenómeno nuevo, pero en los últimos años ha cobrado una dimensión preocupante. Según informes recientes, más del 6% del territorio patagónico está en manos de extranjeros, con grandes extensiones adquiridas por empresarios. Los principales países que invierten en la Patagonia Argentina son Estados Unidos, España, Países Bajos, Brasil, Chile, Suiza, Uruguay, Francia, Alemania, Qatar y Canadá, entre otros. Estas inversiones se dirigen principalmente a sectores como la industria manufacturera, la extracción de minerales y petróleo, el comercio minorista, la banca, la información y comunicación, y la agricultura. 

Según el informe de (1) "LA TECLA" publicado el 6 de febrero del 2024; "el principal propietario de tierras patagónicas es Luciano Benetton, el italiano fundador del Grupo Benetton, que cuenta con hectáreas en Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa Cruz, administradas por la empresa Compañía de Tierras del Sud Argentino. Le sigue en el ranking el grupo chino Grupo Heilongjiang Beidahuang, con propiedades en Río Negro dedicadas a la siembra. En tercer lugar, los franceses Patrick Jean Marie Rey y Hubert Esteban Rey, dueños de Somuncura Patagonia S.A., propietarios de hectáreas en Río Negro y socios comerciales de Lewis. En el puesto 4, el rabino estadounidense Elimeir Libersohn, quien tiene superficie en Río Negro y Santa Cruz. La nómina continúa con el grupo canadiense Gold Corp, con presencia en Santa Cruz; el chileno Roberto Hiriart, con tierras en Neuquén, acaparando todo el lago Hualcupén; el Grupo Burco, con propiedades destinadas al turismo de elite y negocios inmobiliarios en Río Negro y Chubut; el estadounidense Ted Turner, con más de 50.000 hectáreas en Neuquén; la empresa sudafricana Anglo Ashanti Gold, dedicada a la megaminería en Santa Cruz; Ashley Kent Carrithers, estadounidense con tierras en Neuquén; el reconocido británico Joseph Lewis, propietario de lago Escondido en Río Negro; y el sueco Jacob Suchard, dueño y accionista de corporaciones alimenticias y tierras en Río Negro. Por último, los tres lugares restantes del ranking los ocupan propietarios con 20.000 hectáreas: la familia británica Johnston-Julie, en Santa Cruz; el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, con tierras en cercanías de lago Escondido, arroyo La Horqueta y río Chubut; y el francés Andreus George, dueño de Patagonia Franca S.A., empresa que administra sus tierras en Neuquén".

Estas compras han generado conflictos con las comunidades locales y pueblos originarios, quienes han denunciado desplazamientos y restricciones de acceso a tierras que históricamente les pertenecían.

Además, la explotación de recursos naturales ha generado tensiones ambientales. La minería y la extracción de hidrocarburos han provocado daños ecológicos irreversibles en algunas zonas, afectando la biodiversidad y el acceso al agua potable. Organizaciones ambientalistas han denunciado que la falta de regulación adecuada permite que estas actividades se desarrollen sin un control efectivo, poniendo en riesgo el equilibrio ecológico de la región.

El concepto de secesión de la Patagonia ha sido alimentado por diversas teorías, algunas con fundamentos históricos y otras con argumentos geopolíticos. Una de las más conocidas es el "Plan Andinia", una hipótesis que sostiene que potencias extranjeras buscan fragmentar la Patagonia para establecer un nuevo Estado. Aunque esta teoría ha sido cuestionada por muchos analistas, la creciente influencia de actores internacionales en la región sigue generando gran inquietud.

Por otro lado, la presencia de bases militares extranjeras en el Atlántico Sur y la disputa por las Islas Malvinas refuerzan la percepción de una Patagonia en riesgo. La falta de una estrategia patriótica por parte del gobierno argentino para fortalecer su presencia en la región, es criticada por los analistas geopolíticos. La desindustrialización de Tierra del Fuego y la reducción de incentivos para el desarrollo local han debilitado la presencia argentina en el extremo sur, lo que podría facilitar una ocupación extranjera en el futuro.

La región también enfrenta desafíos en términos de seguridad. La presencia de grupos organizados que reclaman tierras bajo el argumento de derechos ancestrales ha generado conflictos con el Estado y con propietarios privados. En algunos casos, estos enfrentamientos han derivado en episodios de violencia, lo que ha llevado a un aumento de la militarización en ciertas áreas.

La Patagonia sigue siendo un territorio clave para el futuro de Argentina. La explotación de sus recursos debe ser regulada con criterios de sustentabilidad y soberanía, evitando que intereses externos condicionen el desarrollo de la región. La implementación de políticas que protejan la propiedad de la tierra y fomenten el desarrollo local es fundamental para evitar una posible fragmentación territorial.

El debate sobre la Patagonia no es solo económico, sino también político y cultural. La identidad nacional y la integridad territorial dependen de decisiones estratégicas que garanticen que la región siga siendo parte integral de Argentina. La historia ha demostrado que los territorios sin una presencia estatal fuerte pueden ser vulnerables a presiones externas. La pregunta que queda en el aire es: ¿Argentina está preparada para defender su soberanía en la Patagonia?

Referencias:

1.- El desafío estratégico de retener la Patagonia Austral: geopolítica, desindustrialización y entrega territorial en Tierra del Fuego - Sindicato Regional de Luz y Fuerza de la Patagonia

2.- https://www.lateclapatagonia.com.ar/82013-quienes-son-los-duenos-de-la-patagonia