Dilema de clase media + jubilados: ¿Sin consumo se votaría por Javier Milei?

Es año electoral. Pero no el que imaginó Javier Milei, quien creyó que el consumo sería más elevado, y cuando se le complicó hasta apostó al delirante 'Plan Colchón', inviable para los países de la OCDE, y hubo que licuarlo en forma apresurada por una opción intrascendente. El RIGI no aportó aún un volumen significativo para la balanza cambiaria. Y el impactante resultado del blanqueo 2024 no pudo repetirse con ninguna herramienta 2025. La carencia de dólares para sostener el consumo provocó la negativa a acumular reservas internacionales del BCRA, un incumplimiento de metas que intenta corregirse emitiendo deuda pública. Milei y su gente están tapando agujeros desde hace semanas. Los verdaderos 'ensobrados' prefieren no mencionarlo pero la clase media y los jubilados están cambiando su humor en forma acelerada.
También se omite que hay resistencia en el gabinete a Luis Caputo y la demostración de las diferencias fue la alterada reunión interministerial con Milei ausente. Hubo gritos y amenaza de renuncias ante un intento de Caputo de nuevo recorte sobre un ministerio y sus uniformados integrantes. Las metas fiscales, todos lo saben, se cumplen con recortes no siempre eficientes. Alguien se lo dijo letra por letra a Caputo durante la reunión. Podría abundarse más en la reunión citada pero con eso es suficiente porque hay que mencionar algo más: los gobernadores comienzan a callar menos, y hasta le entregaron un pliego de condiciones a Guillermo Francos, jefe del Gabinete de Ministros de la Nación.

Milei se aferra a la recomposición de precios relativos y reducción de subsidios (tarifas) y a la creencia de que el IPC del INdEC es verdadero y no trucho, y la inflación baja. Pero esa aparente reducción de inflación ¿suma o resta electores rumbo a octubre 2025?
Cada día es más evidente que octubre será escenario de un plebiscito nacional sobre Javier Milei. Obvio que no es lo imaginado por el Presidente, quien esperaba que fuese un referendo sobre los Kirchner (en extinción anticipada), aún cuando la Corte Interamericana de Derechos Humanos le conceda una cautelar a Cristina Fernández de Kirchner.

Consumo y pobreza
Aunque la próxima medición oficial de pobreza proyecta una baja, el consumo permanece débil tanto entre los sectores postergados como en amplios sectores de clase media y jubilados. La indigencia se empieza a consolidar como un núcleo duro difícil de reducir, mientras que muchos sectores medios han retrocedido y ahora se ubican en niveles de clase media baja.
En la zona metropolitana, el consumo cayó un 1,5% en mayo y la facturación se mantuvo estable respecto al mes anterior, a pesar de la continuidad en la suba de precios. Esto se traduce en menos volumen de compras, según datos de Focus Market.
La clase media, donde los servicios tienen un peso significativo, vio cómo la canasta de consumo se multiplicó hasta tres veces durante el último año, especialmente tras la devaluación de diciembre de 2023 y hasta mediados de 2024, cuando la inflación comenzó a desacelerar. Esto plantea un desafío para el gobierno, que ha concentrado sus esfuerzos en asistir principalmente a los sectores más vulnerables, reforzando programas sociales y aumentando la eficacia de la entrega de beneficios.
¿Qué dice la realidad frente al consumo masivo?
Martín Vauthier, del equipo del ministro de Economía oficial, señaló que la combinación de la Asignación Universal por Hijo y la Tarjeta Alimentar permitió cubrir el 98,1% de la Canasta Básica Alimentaria en mayo, un salto importante respecto al 54,8% de diciembre de 2023. ¿Quién le cree a Vauthier? Es todo nominal, poco real.
Por su parte, el economista Martín Rozada, de la Universidad Di Tella, destacó -según Noticias Argentinas- que la pobreza disminuirá porque los precios de la canasta básica crecen menos que el costo de vida general, a pesar de la caída del salario real registrado. Según Rozada, la evolución de la pobreza está más atada a los precios que al mercado laboral.
En su último informe, Rozada indicó que entre diciembre de 2024 y mayo de 2025 la tasa de pobreza bajó al 34,7% y la indigencia al 7,9%, cifras que contrastan con el 52,2% y 18,3% respectivamente del mismo período del año anterior.
Sin embargo, el consumo masivo sigue sin repuntar y el interior del país registra caídas aún más pronunciadas en volumen y facturación. La persistencia de altos niveles de pobreza en la última década muestra la complejidad estructural que enfrenta la economía argentina y la necesidad de políticas sostenidas para revertir esta realidad.
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